domingo, 14 de enero de 2018

INFOEX, cuando el buen trabajo no es noticia.

En el pleno de la Asamblea de Extremadura, celebrado el día 14 de diciembre de 2017, se debatió sobre temas de interés para la ciudadanía extremeña, sobre la pretensión de restringir nuevas plantaciones de viñedo para la producción de cava, sobre el transporte sanitario terrestre del SES y, aunque de cara a la prensa pasó desapercibido, sobre la campaña de peligro alto de lucha contra los incendios forestales en 2017.

Probablemente si durante el verano hubiésemos tenido la desgracia de padecer un gran incendio forestal (como en Galicia o Portugal, que merecen toda nuestra solidaridad), las portadas de los periódicos y la noticia destacada de noticiarios radiofónicos y televisivos, hubiese sido, como con el incendio en la sierra de Gata de 2015, las consecuencias de los incendios forestales, la descoordinación y las responsabilidades políticas derivadas de su gestión.

En el período de peligro alto de lucha contra los incendios forestales en 2017 se quemaron 5.410 has. en 607 incendios, 600 has. menos que en 2016 y una menor superficie que la quemada en el incendio de agosto de 2015 en la sierra de Gata, por ello al igual que cuando se producen grandes incendios se pone en cuestión todo, hasta la labor de los mismos profesionales del INFOEX, si los datos son buenos todos deberíamos felicitar su buen hacer.

Gracias a la profesionalidad de todos los trabajadores del INFOEX, principalmente, con el apoyo de la BRIF, de los bomberos del SEPEI y del 112, se ha evitado que este año se haya producido un gran incendio en Extremadura. Además en un año muy complicado por la gravedad de la pertinaz sequía que padecemos y por el gran número de días en los que se dieron las condiciones ideales en cumplimiento de la regla 30 – 30 -30 (más de 30 grados de temperatura, más de 30 km/h de viento y menos de 30% de humedad).

Estos buenos datos deben servir para que la Consejera, Begoña García Bernal, se reafirme en que el cambio de la política de gestión forestal que se ha planteado es muy necesaria, sin querer presumir de nada, con la mayor humildad posible, es necesario recordar que gracias a la valentía política se han llevado adelante medidas que facilitan el trabajo de los profesionales y pretenden hacer más complicada la posibilidad de que se origine un gran incendio forestal.

Se han mejorado las condiciones laborales de los profesionales del INFOEX, se ha aumentado la contratación hasta el 30 de noviembre, se han realizado campañas de información para evitar que sigan creciendo el número de incendios provocados por imprudencias, se están ejecutando los planes periurbanos en los municipios de alto riesgo de incendio, se están realizando los caminos de evacuación en los pueblos con una única salida, se están diseñando reforestaciones en mosaico que creen masas forestales discontinúas, se está actuando en los montes privados, se ha llevado a cabo la figura de los montes protectores


Todas estas medidas son valientes decisiones políticas para dificultar que un fuego llegue a convertirse en un gran incendio, pero, evitando debates demagógicos e iletrados que afirman que lo mejor es que no haya ni un solo incendio, la ciudadanía debe tener claro que incendios siempre habrá, porque nuestro ecosistema mediterráneo tiene especies que con el fuego se reproducen más, se regeneran, propagan y rebrotan, lo que tenemos que conseguir es evitar que se conviertan en grandes incendios fuera de capacidad de extinción y ahí si es importante conjugar las decisiones políticas con la profesionalidad de los técnicos y del INFOEX.

Tren digno ya para Extremadura

Timothy Snyder, en su libro “Sobre la Tiranía”, analiza en uno de sus capítulos, la necesidad de creer en la verdad; afirma que “renunciar a los hechos es renunciar a la libertad. Si nada es verdad, nadie puede criticar al poder, porque no hay ninguna base sobre la que hacerlo. Si nada es verdad, todo es espectáculo”.

No cabe duda que la concentración del pasado 18 de noviembre de 2017 en la plaza de España de Madrid, ha sido un hecho histórico para la región, porque se ha basado en realidades indiscutibles. Hasta el propio ministro de fomento, Iñigo de la Serna, se ha apresurado a ratificar que la reivindicación de Extremadura, por un ferrocarril del siglo XXI y por un tren digno, es justa.

El pasado día 21 de noviembre en la jornada técnica de formación sobre economía circular en el sector agrario en Extremadura, Luis Miguel Domínguez, uno de los naturalistas más reconocidos del país, también se unió a esta exigencia, afirmando que le hubiese gustado haber llegado a Mérida, desde Madrid, en un tren digno.

Porque la reivindicación no se ha acabado el día 18 de noviembre, más bien al contrario, no ha sido más que el inicio de una decente reclamación que cada día necesita más altavoces y más respaldo, que más voces se unan a la ciudadanía extremeña que ha puesto de manifiesto que se puede estar unida para conseguir que se haga justicia y el gobierno dote a nuestra región de un ferrocarril moderno del siglo XXI.

Ya que el ferrocarril que tenemos, en la actualidad, en Extremadura se parece más, en algunos tramos, al que Stephenson inauguró en 1825, en Inglaterra, entre las ciudades de Stockton y Darlington, que el que hace 25 años el gobierno socialista de Felipe González inauguró entre las ciudades de Sevilla y Madrid. Y como afirmaba Pepa Bueno, al leer el Pacto por el Ferrocarril, no queremos ni podemos ser el Sur del Sur.

No queremos tener un ferrocarril antiguo, lento, del siglo XIX, porque aquí lo antiguo no es un patrimonio que nos dé valor añadido, como las ruinas romanas de Mérida, Cáparra, o el casco histórico de Cáceres. No sentimos aprecio por este ferrocarril y necesitamos un tren moderno para cohesionar la región y para facilitar los desplazamientos entre nuestros municipios, el transporte de nuestras mercancías, la llegada de turistas…

En jardinería es apreciada, por su valor patrimonial e histórico, la especie arbórea más antigua que según los fósiles encontrados ha sobrevivido en nuestro planeta más de 270 millones de años, el Ginkgo (Ginkgo biloba) un espléndido, peculiar y resistente árbol, incluso se afirma que un ejemplar en Hiroshima fue capaz de rebrotar tras el estallido de la bomba atómica.


Los extremeños y las extremeñas desde la verdad y la resistencia vamos a seguir exigiendo que se mejoren las infraestructuras ferroviarias en nuestra región, seremos muchos más de los 40.000 que asistimos a la plaza de España, todos unidos por una causa justa, desde la libertad que nos da tener la razón de nuestra parte, fuertes y resistentes como el Ginkgo, a pesar del olvido secular del gobierno, sobreviremos a nuestro “Little Boy” particular y conseguiremos lo que nos merecemos.

Movilizarse por Extremadura

Sin duda, este otoño está siendo histórico por muchos motivos. Se recordará por la sequía y por las altas temperaturas, también por las pérdidas en la cosecha de aceituna, principalmente la de verdeo y por la reducción de los jornales. Esto es lo que más preocupa, en el día a día, a los agricultores extremeños. Por eso el Grupo Socialista de la Asamblea de Extremadura ha presentado una propuesta de pronunciamiento para que el Gobierno de España ayude a paliar los daños de la sequía.

El cambio climático es ya una evidencia tal que parece haberse convencido hasta el primo de Rajoy, mientras Trump está aún meditando sus consecuencias tras la sucesión de huracanes que han afectado a EEUU y al Caribe, desde “Arlene”, tormenta tropical que se adelantó al mes de abril, hasta “Ophelia” a mediados de octubre, pasando por el huracán “Irma” con efectos devastadores.

Un otoño particularmente cálido y seco que está alterando la vida de nuestra flora y fauna. No hay que ir muy lejos para encontrar sus graves consecuencias, olivos con la cosecha perdida, melojos secos, o plantas y árboles ornamentales con flores como si la primavera estuviera a la vuelta de la esquina.

En el patio de la Asamblea podemos deleitarnos con la presencia de un árbol del amor “Cercis siliquastrum, cuya generosa floración primaveral llama la atención a todo el que aprecie y disfrute de las maravillas de la jardinería. Este mes de octubre se puede observar, con asombro, que ha comenzado, tímidamente, a florecer.

Evidencias de que lo importante debe priorizarse sobre lo accesorio, cuestiones en muchas ocasiones nimias que centran la actualidad. En estos monotemáticos, el conflicto sobre la secesión de Cataluña, sucesos triviales siguen ocupando la escaleta informativa, generalmente negativos, poco trascendentes para la convivencia, poco educativos y menos aún medioambientales o científicos.
El cambio climático debe ser, por ello, un eje fundamental en nuestras preocupaciones políticas, la decisión por potenciar la economía verde y circular, una apuesta clara que ha de apoyarse por toda la sociedad extremeña y que debe unirnos para preservar el medio natural que le vamos a dejar a las próximas generaciones.

La unión debe ser generosa, no interesada, al igual que con la reivindicación de la mejora del ferrocarril en nuestra región, debemos firmar un pacto por la conservación de nuestra dehesa, de nuestros bosques, un acuerdo para potenciar un cambio de modelo forestal, por el proyecto “Mosaico”, por la agricultura ecológica, por la lucha contra la despoblación, por la defensa de nuestros pueblos que servirá para evitar el abandono del campo y como protección contra los numerosos incendios forestales.

Es necesario volcarse primero por mejorar nuestras infraestructuras, especialmente las del ferrocarril, para conseguir un tren del siglo XXI como se merece Extremadura, para que estemos bien comunicados y que las personas se puedan desplazar, tanto los extremeños como todos los turistas que, por falta de infraestructuras, no se acercan a maravillarse con los paisajes y patrimonio de nuestra región.

Y también hay que mejorar las infraestructuras para poder exportar nuestras mercancías y productos agroindustriales, puesto que eso contribuirá a generar riqueza y a mantener la población en nuestros pueblos.


Por consiguiente, el 18 de noviembre toda la ciudadanía extremeña tiene un compromiso con nuestra tierra, para reivindicar en Madrid lo que es justo y merecemos, más en estos tiempos donde se comprueba que las desigualdades crean conflictos donde el Estado siempre ha invertido, donde tienen más comunicaciones e infraestructuras. Los socialistas, sin duda, reivindicaremos el 18 de noviembre, para acercar territorios, para abrir fronteras, para alzar la bandera de la igualdad y la solidaridad. En Madrid nos vemos.

Incendios forestales

Terrible, esa es la palabra más usada tras conocer las consecuencias dramáticas del incendio que ha asolado el centro de Portugal (Pedrógão Grande) una tragedia que nos debe hacer reflexionar sobre las consecuencias de las políticas de reforestación y sobre las consecuencias del cambio climático, que dadas las temperaturas de este mes de junio, creo que cada vez está menos en duda, a no ser que se pregunte al primo de Rajoy o a Donald Trump.

Que los montes estén repletos de repoblaciones de eucaliptus o de pino (fundamentalmente Pinus pinaster) debe remover conciencias críticas sobre la manera de gestionar las masas forestales, evitar los monocultivos de especies que en muchas ocasiones son alógenas.

Por consiguiente, en estos momentos es necesario explicar la política que quiere desarrollar la Junta de Extremadura, a través de su Consejería de Medio Ambiente con la ayuda y el asesoramiento de la Universidad de Extremadura. La Consejera, Begoña García y el profesor, Fernando Pulido, están llevando a cabo una labor a largo plazo para cambiar esa mentalidad forestal apostando por el proyecto Mosaico.

El proyecto Mosaico pretende cambiar la manera de gestionar el monte, no únicamente los públicos también los privados, llegando a acuerdos con los propietarios particulares para poder limpiarlos, ordenarlos y prevenir los incendios en estas parcelas que en muchas ocasiones están completamente abandonadas.

Así sucedió en los incendios (tristemente olvidados por el PP y Rajoy) del año 2015 en la Sierra de Gata, fundamentalmente en el municipio de Acebo, donde la mayoría de las parcelas quemadas eran privadas y así se pretende actuar en el valle del Árrago, donde los propietarios ya han creado una Junta Gestora para llevar a cabo el proyecto Mosaico.

El 4 de mayo se aprobó en la Asamblea de Extremadura la modificación de la Ley 5/2004, de prevención y lucha contra incendios forestales en Extremadura, para poder actuar en las parcelas privadas, de manera onerosa o gratuita, que faciliten a la gente más humilde tener limpias sus parcelas forestales.

El proyecto Mosaico pretende crear una parte de montes que rompan los monocultivos actuales y que sirvan como monte protector, que se consiga poner de acuerdo a los Ayuntamientos con las comunidades de propietarios privados, que puedan gestionar las masas forestales de manera concertada con la Junta de Extremadura con el único objetivo de evitar grandes incendios, explosivos y catastróficos que arruinen nuestro patrimonio medioambiental.

Nuestro objetivo debe ser aplicar una política forestal que respete la biodiversidad, que complique la posibilidad de que se genere un gran incendio forestal, que mejore la gestión de los montes de utilidad pública, pero también los privados, que proteja a los habitantes de las zonas rurales forestales dándoles protagonismo y participación en la toma de decisiones, favoreciendo que se puedan desarrollar actividades económicas productivas y de transformación de los productos de la zona tanto agrícolas como forestales.


Para ello el proyecto Mosaico, dentro del marco de impulso de la economía verde y circular, son primordiales para elaborar una nueva política forestal que apoye estas actividades, que fijen población y que eviten la formación de grandes incendios forestales como el que han sufrido nuestros vecinos portugueses, a los que además de mostrar nuestra solidaridad y pesar, ayudamos con medios materiales y también con ideas como las que está aplicando la Junta de Extremadura que en el futuro serán la mejor prevención posible.

Cambiar la política forestal en Extremadura.

El pasado 4 de mayo de 2017 se aprobó en el pleno de la Asamblea de Extremadura la modificación de la Ley 5/2004 de 24 de junio, de prevención y lucha contra incendios forestales en Extremadura.
Una medida más para conseguir luchar contra los fuegos que arrasan nuestras masas forestales durante el verano. Una obligación marcada por el gobierno socialista de la Junta de Extremadura que ha tomado la iniciativa y ha sabido sacar adelante esta modificación que ha sido aprobada por todos los grupos Parlamentarios.

Tras los incendios de 2015 en la Sierra de Gata se constató la necesidad de cambiar varios aspectos de la política forestal, sin duda se ha iniciado este valiente camino para conseguir, entre todos, el objetivo de hacer más difícil que incluso en las condiciones climatológicas más adversas, la acción de los incendiarios provoque un gran incendio.

Una de los cambios necesarios era la de facultar a la administración para posibilitar su actuación en los montes privados, de manera onerosa o gratuita, para no cobrar a la gente más humilde que no puede hacer frente a la inversión de mantener limpio su pequeña parcela forestal. Porque el fuego no entiende de fronteras entre parcelas privadas y públicas y porque la prevención no puede realizarse únicamente en el monte público.

Sin duda otro de los cambios es la apuesta por el proyecto mosaico, que va a evitar la existencia de grandes masas de monocultivo, tanto en monte público como en el privado. Un trabajo conjunto con la Universidad de Extremadura que está originando un cambio de la mentalidad y una apuesta por el desarrollo agroforestal del norte de la provincia de Cáceres, que poco a poco puede conseguir la diversificación de los recursos forestales y la mejora de su explotación.

De igual forma la Junta de Extremadura, ha tomado medidas para agilizar la puesta en marcha de los planes periurbanos en los municipios de alto riesgo de incendio y la mejora de los accesos para construir caminos de evacuación en los pueblos que únicamente tenían una salida.

A pesar del olvido de Rajoy, que no aprobó el tan solicitado plan de ayudas para la Sierra de Gata tras el incendio del año 2015, ni aprobó la declaración de la zona como catastrófica para beneficiar a los afectados con ayudas y rebajas fiscales, el PSOE en la Junta de Extremadura ha comenzado a tomar medidas que a largo plazo mejorarán la prevención en los incendios forestales y fundamentalmente facilitarán el trabajo a los profesionales del INFOEX, para que tengan mejores recursos, mejores condiciones laborales, mejores accesos, más facilidad para trabajar en la lucha contra los incendios y menos riesgos.

El PP olvida tradicionalmente a los extremeños, rebaja un 17% las inversiones en Extremadura, no apuesta por invertir y mejorar el ferrocarril en nuestra tierra ni por poner en marcha el tren de alta velocidad, deja fuera a la región en la subasta de energía renovables impidiendo que se desarrollen proyectos de energía eólica, no facilita la apertura de la mina de Aguablanca, mientras permite el atentado medioambiental de la mina de uranio a cielo abierto en Retortillo (Salamanca), no concede un plan de empleo especial para Extremadura que apueste por desarrollar la estrategia de economía verde y circular…, ¿recuerdan aquello de “Hacemos Extremadura”?


Sostenibilidad y economía verde

A finales del año 2007 el gobierno socialista presidido por José Luis Rodríguez Zapatero aprobó la Ley 45/2007, de desarrollo sostenible del medio rural. Fue una Ley, como tantas otras que pretendía conseguir la igualdad, en este caso la igualdad entre lo urbano y lo rural, para un desarrollo solidario en las mismas condiciones que favoreciera un crecimiento armónico y evitara inequidades dependiendo del lugar en dónde uno residiera.

Fue una Ley fruto del esfuerzo de los socialistas, como la mayoría de las leyes aprobadas en este país, que conceden derechos, libertades e igualdad. Es una Ley tristemente olvidada e incumplida por el PP y de cuyo incumplimiento se ha debatido y aprobado una iniciativa en la Asamblea de Extremadura a propuesta de Podemos.

Es de valorar que los grupos parlamentarios lleguen a acuerdos y a consensos, más aún en este tiempo lleno de postverdad donde los matices desaparecen y donde la confrontación, la bronca e incluso el insulto parece que se apropian del debate parlamentario. Donde se habla mucho, pero se lee poco, donde se citan ejemplos pretendiendo presumir de radicalidad y pureza, que dejan en evidencia ignorancia o incultura.

Póngase el manido ejemplo de acordarse de líderes extranjeros como Pepe Mujica, para desear que su ejemplo cundiera en España, cuando coincidiendo en la altura política del ex presidente uruguayo, la mayoría desconoce su trayectoria vital y sus políticas en los 5 años al frente de la presidencia de aquel maravilloso país. Aconsejo leer el libro Una oveja negra al poder para comprobar por uno mismo la altura política de esta personalidad esencial para la política mundial. Es palpable en cada una de sus palabras, la falta de rencor, el aprecio y consideración a ciertos empresarios  a los que considera imprescindibles para crear riqueza y laburo –trabajo- y sus acuerdos con la derecha. Que le suponía la incomprensión de sus compañeros de partido.

La política de sostenibilidad, como tantas otras que generan crecimiento armónico, fue diseñada por los socialistas, a pesar de los recortes presupuestarios de Rajoy, especialmente en Extremadura, que este año pretende recortar otro 17% en las infraestructuras para la región, tanto la Junta de Extremadura como las Diputaciones provinciales están realizando políticas para evitar la brecha entre lo urbano y lo rural.

Así es como en la provincia, la Diputación de Cáceres ha diseñado programas para la apertura de las casas de cultura, museos y bibliotecas en todos los pueblos, para llenar de actividades todas las pedanías y asegurar obras en todos los pueblos de la provincia. Además el año pasado desarrolló una iniciativa pionera con la celebración del Congreso contra el despoblamiento celebrado en Montánchez y que tendrá continuidad en la provincia de Huesca.

Mientras el modelo de Guillermo Fernández Vara es desarrollar en Extremadura un marco para una política basada en la economía verde y circular, en Castilla y León gracias al interesado apoyo del PP se están destrozando las dehesas salmantinas permitiendo la tala indiscriminada de encinas en Retortillo, para la explotación de una mina de uranio a cielo abierto. Fue el ex ministro Cañete, ahora Comisario, el que firmó la autorización para este atentado ecológico.

La política del PP no se desarrolla pensando en la sostenibilidad, su modelo es de economía lineal, máxima explotación de los recursos hasta su agotamiento, nada de economía circular. Leyendo a Joseph Roth, encontré una cita de La Cripta de los Capuchinos, en la que se detalla cómo en los momentos importantes lo que parecía la primera patria, la verdadera amistad, se pierde para seguir  la auténtica  la de la familia, la que carece de frivolidad y mezquindad, la que desde la sencillez y a pesar de sus defectos es la que realmente te llena.

Por ello en este tiempo de impostura y postverdades, me ratifico en el compromiso con las políticas del PSOE, de sus líderes y de su logros, porque solemos apreciar más lo de fuera y lo extraño, olvidando que en nuestra casa tenemos grandes compañeros de los que sentirnos orgullosos y de los que aprender. Como afirmaba nuestro querido Ramón Rubial, la sociedad no se transforma con una ametralladora, “la política de transformación más eficaz es la que se ejecuta desde el BOE”.


Monfragüe, robusto como una encina.

Durante este año 2017 se van a realizar numerosas actividades en conmemoración del X aniversario de la declaración de Monfragüe como Parque Nacional. Por ello el Director General de Medio Ambiente presentó en la Asamblea de Extremadura, el día 24 de marzo, el programa organizado por la Junta de Extremadura para celebrar tan emblemática fecha.

A todos los que nos gusta la naturaleza y disfrutamos de la flora y la fauna, nos enorgullece que desde la política se apueste por potenciar las actividades, las inversiones y los proyectos que cada día hacen crecer nuestro Parque Nacional de Monfragüe.

Aún más cuando la sensibilidad política llega al punto de apostar por una apertura del Parque Nacional de Monfragüe accesible para todos e inclusiva, que acerque el parque y  sus encantos naturales a los que de no ser así no tendrían la oportunidad de disfrutarlo.

Durante estos dos últimos años se han sucedido las buenas noticias sobre Monfragüe, el parque ha sido distinguido como destino turístico startlight, ha obtenido la Q de calidad, la NASA ha seleccionado el cielo de Monfragüe como foto del día, se ha consolidado la FIO…

Podríamos decir que, si en cuanto a fauna, el Parque Nacional de Monfragüe es reconocido por ser la mayor colonia de buitres negros del mundo, en cuanto a la flora el símbolo del parque es la encina (Quercus ilex) que marca el paisaje del parque y sirve como lugar de nidificación del majestuoso buitre negro.

La encina es el árbol referente del paisaje de Monfragüe y de la dehesa, un árbol robusto, con ejemplares espléndidos, declarados alguno de ellos como árboles singulares en nuestra región, pero que también sufre plagas y enfermedades, la más crítica y difícil de combatir “la seca”. Actualmente el Parque Nacional de Monfragüe goza de buena salud, pero, al igual que la encina, también ha sufrido, sus plagas y enfermedades particulares, especialmente problemas de gestión, por ello no está exento de futuros riesgos.

La buena gestión del Parque es vital para el porvenir de Monfragüe, tanto Rajoy como Monago pueden presumir poco, ya que si el primero olvidó incluir partidas presupuestarias, y suprimió las ayudas destinadas a los municipios que comprenden el parque, el segundo se caracterizó por la constante polémica en la gestión y por la organización de cacerías en Monfragüe.



El Parque Nacional de Monfragüe debe ser ejemplo de la marca Extremadura, de nuestro patrimonio natural, de nuestro ecosistema adehesado, de la apuesta por una economía verde y circular que atraiga proyectos innovadores, medioambientalmente sostenibles y que puedan incluirse dentro de la estrategia de desarrollo que defina nuestro futuro. Una estrategia participativa con el horizonte de 2030, pero que tiene que ser considerada el eje de la política de nuestra región, fuera de la controversia política y de la confrontación y que se convierta en el nuevo paradigma del desarrollo territorial y cohesionado de Extremadura.

No hay piel de corcho contra el machismo

El pasado 16 de febrero se debatió en la Asamblea de Extremadura una iniciativa sobre el futuro del sector del corcho, un sector que desde el inicio de la autonomía ha sido considerado por los socialistas como prioritario, por ello ya en 1984 se constituyó IPROCOR.

Desde que la Junta de Extremadura volvió a recuperar su nombre originario, los socialistas a través del Consejero de Economía e Infraestructuras y su equipo directivo se han reunido con el sector y se ha presentado un proyecto POCTEC liderado por CICYTEX.

El mantenimiento de los sistemas adehesados, donde alrededor de las encinas y los alcornoques deben pilotarse las políticas nucleares para el desarrollo, protección y sostenibilidad de ese ecosistema que caracteriza nuestro paisaje, se situará dentro del marco regional de impulso a la economía verde y la economía circular en Extremadura. Se van a desarrollar proyectos donde la dehesa será el eje prioritario de actuación y donde la gestión forestal de los montes de utilidad pública de Extremadura buscará incrementar el valor de los productos forestales, entre ellos el corcho.

El corcho es un producto natural obtenido de la corteza del alcornoque (Quercus suber), natural como la demagogia en las iniciativas presentadas por el PP en la Asamblea de Extremadura cuando está en la oposición. La pasada legislatura, cuando gobernó, lo único que se recuerda como medida de apuesta al sector del corcho en la región fue una fotografía de la Vicepresidenta del “GOBEX”.


Empeñados en la política de marketing y propaganda olvidaron que había que resolver los problemas reales y así cuando en 2010 exigían que la Junta de Extremadura aprobara la creación de una Denominación del corcho, líneas de crédito para las empresas corcheras, campañas de promoción y un plan de rescate desde el gobierno, entonces presidido por Zapatero. O no esperaban gobernar nunca o cambiaron sus prioridades puesto que a partir de 2011 gobernaron tanto en Extremadura como en España y ninguna de esas medidas fue impulsada por el PP.

Y es que hay ciertas actitudes que en política no pueden consentirse, la mentira se paga con derrotas electorales, no se puede tener “piel de corcho”, insensibilidad ante las declaraciones, los sucesos o los problemas cuando se tienen que decidir políticas que afectan a la vida de las personas.

Como tampoco se puede consentir que el alcalde del PP de Casas del Monte, tras haber realizado en las redes sociales manifestaciones machistas, obscenas e injustificables contra una vecina del pueblo, siga ejerciendo el cargo. Ante estas declaraciones el PP no puede actuar como una de las definiciones del corcho, dejándose llevar, aun considerando que su alcalde cumple con la tercera acepción que la RAE utiliza para la palabra alcornoque.

Contra el machismo no se puede mostrar tibieza, contra las declaraciones machistas de un cargo público no cabe otra actitud que la firme condena y la asunción de responsabilidades. Los partidos políticos no pueden más que cesar o hacer dimitir a quién muestra prepotencia y desprecio hacia las mujeres considerándolas inferiores o de su propiedad, con comentarios obscenos y vergonzosos propios de los que hacen cotidiana la falocracia.

sábado, 13 de enero de 2018

Presupuestos para una economía verde

El 24 de enero se aprobaron los presupuestos del año 2017 para Extremadura, unos presupuestos que marcarán la apuesta de la Junta de Extremadura por desarrollar la estrategia de impulso hacia una economía verde y circular en nuestra región.

En el debate parlamentario surgieron diatribas diversas sobre las líneas principales y medidas concretas que deberían implementarse en este presupuesto. Cada grupo, excepto Podemos que no presentó ninguna enmienda, pretende aportar, añadir y mejorar la Ley de Presupuestos de Extremadura. En muchos casos con medidas de calado y otras de manera meramente ornamental.

Durante los meses de invierno en el ámbito de la jardinería destaca el cinamomo (Melia azedarach) como una especie ornamental especialmente atractiva porque sus ramas, desnudas de hojas, permanecen repletas de frutos globosos amarillentos que durante el transcurrir de los días de invierno se van aclarando, pareciendo así repleto de pequeñas bolitas de nieve.



Esos frutos sin embargo esconden en su interior la desagradable sorpresa de ser venenosos, por ello en muchas ocasiones lo que parece bueno, repleto de belleza o atractivo, no es más que un escaparate que oculta su toxicidad.




Como en el caso de las políticas que quiere el PP que lleve a cabo la Junta de Extremadura, que aunque aparentemente parecieran muy benévolas, ocultan un alto grado de toxicidad, son nocivas para el presupuesto de Extremadura, porque intentan tapar las vergüenzas de la dejación de funciones del Gobierno de España para con Extremadura.

Que el PP quiera que la Junta de Extremadura haga inversiones donde no tiene competencia, no es leal para con nuestra región, es leal para con el PP. Que el PP quiera que la Junta de Extremadura presupueste una partida para la lucha contra el camalote (Eichhornia crassipes), cuando le corresponde, porque tiene las competencias, a la Confederación Hidrográfica del Guadiana, o cuando en el pasado estuvo en contra de considerar la plaga del camalote una emergencia votando en contra de la actuación de la UME, es nocivo para Extremadura.



Que el PP quiera que la Junta de Extremadura cree una partida para establecer compensaciones en el área de influencia del Parque Nacional de Monfragüe, no es leal para con nuestra región, es leal para con el PP, porque le compete al Organismo Autónomo de Parques Nacionales, dependiente del Gobierno de España. Y lo es más con los antecedentes existentes que evidencian la despreocupación del PP sobre Monfragüe cuando desde el año 2012 al 2015 el gobierno suprimió las ayudas a los municipios que están dentro del parque.


Con esa dinámica practicada por el PP en el presupuesto para el año 2018 presentarán una enmienda para que la Junta de Extremadura termine la infraestructura ferroviaria necesaria para que llegue el AVE a la región, en lugar de exigir al Gobierno que invierta decididamente en el ferrocarril en Extremadura. Y esa propuesta no sería leal para con nuestra región, sería leal para con el PP.