Hace unos días un amigo me comentó que estaba en auge el cultivo de la Stevia, en concreto de la variedad Stevia rebaudiana, que ofrecía grandes oportunidades para el Norte de la provincia especialmente como sustitutivo de cultivos que pudieran ir perdiendo subvenciones europeas, a raíz de esa conversación por mi natural curiosidad me informé con interés.
La Stevia rebaudiana es una planta tropical que se utiliza como edulcorante natural sustitutivo del azúcar, es muy empleado en Brasil, Paraguay e incluso Japón. Es una especie plurianual fácil de cultivar y que posee numerosas propiedades medicinales, pero su mayor virtud es la de poder ser empleada como edulcorante fundamentalmente en personas con diabetes.
Esta información técnica me vino a la cabeza este lunes al escuchar la monserga mañanera de Monago. Que ahora presume de la creación de un montón de miles de empleos mientras los socialistas los destruían. Esta diatriba matinal empieza a molestar e irritar considerablemente a los oyentes, porque los trata como imbéciles, puesto que en la actualidad hay alrededor de 30.000 parados más que cuando Guillermo Fernández Vara dejó la presidencia de la Junta de Extremadura a principios de julio de 2011.
Monago pretende alegrar la semana a los oyentes con buenas noticias, pero no entiende que no se puede pretender dar júbilo mintiendo. Que más que un edulcorante para endulzar el café matinal y comenzar con buen ánimo la semana, lo que consigue es encorajinarnos y amargarnos el desayuno.
Monago desea alcanzar con el marketing lo que no logra obtener con sus políticas, es tal su fracaso en estos años de gobierno, que nos cuenta una mentira semanal para pretender que ignoremos los verdaderos problemas de la región y que olvidemos sus viajes festivos, mientras la realidad lo desmiente y le salpican los datos reales como el del déficit de 2011 conocido recientemente.
El verdadero remedio para esta región y que ha demostrado su valía, es el que sin necesidad de engaños y diatribas matinales ofrece el PSOE, que ha llevado como bandera la igualdad en sus políticas públicas, que hizo posible que en todos los pueblos de la región existiera una malla que protegía a la ciudadanía y que hacía habitable cada rincón de Extremadura.
El valor de Extremadura lo representa Guillermo Fernández Vara, que hizo posible una red de centros sanitarios que ahora pone en peligro el PP, que modernizó el SES y le dio prestigio y reconocimiento, que garantizó el transporte a los alumnos de bachillerato…, mientras Monago se despacha ahora con que va a ampliar un poco el horario de algunas urgencias que él recortó, mientras Monago engaña diciendo que va a rebajar parte del canon de agua que él aprobó, mientras Monago permite que los estudiantes de bachillerato continúen sin transporte gratuito a los Institutos de la Región.
Podrán gastar en marketing, en carteles, en vallas publicitarias, en mensajes radiofónicos, en diatribas matinales…, pero no podrán hacernos callar ni evitar que destapemos las mentiras de un gobierno insensible que lo único en lo que se esfuerza es en invertir en propaganda y en anuncios, entretanto los extremeños y extremeñas desayunan amargamente escuchando con indignación sus mentiras a la espera que el cambio socialista revierta esta desoladora situación y convierta la hiel del PP en soluciones para la gente.
El madrugón matinal en numerosas ocasiones te recuerda que debiste acostarte antes, sueles prepararte el desayuno y para escuchar lo que ha pasado en el mundo enciendes la radio. Desde hace un tiempo Monago, que sigue destacando por su mentiras permanentes, como la de hacer públicas todas sus cuentas en el mes de enero de 2015, se despacha con un sermón matinal al más estilo NODO de la época dictatorial, mientras muchos extremeños desayunan.
Discurso propagandístico, que aún nadie ha explicado cómo se paga, si por el PP o por el gobierno, que últimamente finaliza con “algunos dicen podemos, mientras nosotros decimos lo hacemos”. Tras la fallida legislatura del PP que encabeza Monago, lo único que le queda es enredarse y ejercer de trilero, engañando y manipulando los datos y los mensajes.
El gran fracaso de Monago ha sido el incumplimiento de su promesa de creación de empleo, llegará mayo y dejará la cifra de paro muy por encima de la que había en junio de 2011. Monago se enreda con propaganda, con anuncios, decía que ‘lo primero era el empleo’ y está claro que para él lo primero es la propaganda.
Los extremeños no se merecen un Presidente mendaz que olvidó sus compromisos, incluso el de cortarse los dedos si hacía un recorte en la región: ha cerrado urgencias rurales, ha suprimido el transporte escolar en bachillerato, ha recortado la plantilla de profesores, ha suprimido becas, ha aumentado los impuestos como el del canon del agua…, eso ha hecho. En Extremadura a los que se enredan en embustes y excusas sin justificación se le llama “enreas”.
El “enrea” de Monago parece que ha seguido el ejemplo de las enredaderas, que se retuercen y trepan hasta conseguir invadir todo el espacio posible. Estas plantas son muy atractivas para cubrir muros, pérgolas, vallas e incluso fachadas de las viviendas, intentando cubrir las zonas menos atractivas y modificando la percepción y la sensación óptica del visitante.
Existen numerosas especies trepadoras ornamentales que son utilizadas en jardinería como; la buganvilla (género Bougainvillea); las clematis (Clematis vitalba); la glicinia (Wisteria floribunda); el jazmín (género Jasminum); la hiedra (Hedera hélix), pero algunas no son lo que parece, son tóxicas e incluso venenosas.
Es evidente que Monago está resultando un peligro para esta tierra ya que, como algunas enredaderas, es tóxico para Extremadura, ha paralizado la región, ha provocado un aumento del paro, ha recortado servicios públicos sanitarios y educativos imprescindibles y está provocando una brecha cada vez mayor en el mundo rural de la comunidad autónoma.
Cuando Juan Carlos Rodríguez Ibarra manifestó que Extremadura (además de por el atraso secular)”había ido más despacio porque íbamos todos juntos”, marcó la prioridad para los socialistas. Cuando Guillermo Fernández Vara apostó por un sistema sanitario igualitario y modélico, marcó la prioridad de esta tierra, por ello son el Valor de Extremadura.
La Agenda del Cambio de Guillermo Fernández Vara es el compromiso para cumplir lo prometido, al contrario de como le sucede ahora a Monago que continúa creyendo su propaganda sin darse cuenta que se enreda en las ramas de una hiedra, de la que orgulloso come sus frutos, pero inconsciente de su toxicidad está poco a poco provocando que los electores extremeños lo coloquen en mayo en el lugar que merece.
